En el momento exacto
que vio a Bella supo que sería para ella y ahora que los une un vínculo
irrompible no está en sus planes dejarla ir....nunca.
Edward
POV
Parte
2
Me esforcé por ser el mejor
asistente, cada mañana un enorme ramo de flores adornaba su oficina y con ver
su sonrisa me sentía pagado. Llevaba dos semanas en mi puesto y de alguna manera
empezaba a conocer a Bella. Estaba decidido a contarle toda mi historia es por
eso que la invitaría a cenar, en un ambiente adecuado las noticias que planeaba
darle no debería tomarlas tan mal ¿verdad?.
Sabia que iba a preguntarme algo,
pero no pudo pues en ese momento el orangután de su ex novio apareció en la
oficina proclamando a Bella como su novia lo peor fue que se acerco y la beso,
quise matarlo en ese preciso instante, estaba por hacerlo cuando la propia Bella
lo quito de su camino encarándolo por el beso y empezó una absurda discusión de
que no habían terminado sino que se habían tomado un tiempo, trato de
abrazarla, más Bella esta vez fue más rápida y se negó. Noto si presencia y me
pregunto quién era yo…le dije que era Edward Cullen (el padre del bebe de Bella
y futuro marido), pero ella termino la frase presentándome como su asistente,
aquello me molesto aún más que la presencia de ese tal Emmett.
Me miro como si tratara de
recordar quién era, pero con su pequeño cerebro jamás lo lograría. Nos
enfrascamos en la discusión de quien debía irse de la oficina. Por el rabillo
del ojo vi como Bree entraba a la oficina y saludaba a la futura mamá.
Nuevamente Emmett empezó a hacer el ridículo pensando que él era el padre,
aunque Bella trato de ser lo más suave para decirle que no. Me acerque a ella y
la tome de la cintura, esperaba que aquel mensaje fuera claro para él. No fue
hasta que Bree le señalo lo obvio que supo quién era el padre…yo. Realmente era un imbécil cuando hablo de
engaños y demases, estaba por patearlo cuando oí que me llamaba pez gordo, será
que si me reconoció trate de ignorarlo y no dejar que el tema avanzara,
finalmente se marcho. Bella trato de preguntar a lo que se refería, pero preferí
bromear. Sería esta noche en que le contaría toda la verdad.
Estuve el resto del día
practicando como le contaría todo acerca de mi fortuna y mi vida. Esperaba que
no lo tomara mal, en el poco tiempo que la conozco sé que es una mujer sencilla
y que odia que le mientan. Aunque tuviera que arrastrarme haría que Bella me
perdonara y que tratara de entenderme.
Arregle todo para llevarla a un
lugar muy especial y al ir por ella casi caigo al verla ahí tan hermosa…esa
palabra no alcanza a definir como estaba aquella noche. Me hice de valor luego
de llegar y hablar de un par de banalidades, hasta que le conté toda mi historia,
le pedí que no interrumpiera, su rostro mostraba distintas emociones desde la
sorpresa y la pena cuando supo lo de mis padres, distintas fueron sus emociones
cuando le conté lo de mi “pequeña fortuna” note que estaba enojada y
decepcionada por el engaño.
Me pidió que nos fuéramos del
restaurant y supe que no era una buena señal, hice lo que me pidió esperando
que no estuviera tan furioso. El camino lo hicimos en absoluto silencio, cuando
llegamos a su casa le arrebate las llaves y solo prometí devolverlas si me
besaba, así lo hizo pero dejo un casto beso en mis labios. Cuando estaba alejándose
la acerque a mí y la bese como se debía. Abrí la puerta de su departamento la volví a
besar, antes de irme le dije que si le conté toda la verdad fue porque deseaba tener
una relación sin mentiras.
Llegue a mi departamento y
escuche mis mensajes uno de ellos tenía una noticia me cayó como un balde agua
fría, muy dentro de mí siempre supe que existía una posibilidad como aquella,
pero después de un tiempo deje de esperarlo, es por eso que ahora me toma de
manera tan sorpresiva.
Soñé toda la noche con Bella y en
uno de ellos me hacia una pregunta, su rostro me miraba con expectación
esperando algo que tal vez no podía darle, pese a lo mucho que pensé que sí. Sentía
que me costaba articular palabras y que lo que dije fue cualquier frase.
Me levante agotado y honestamente
luego de la noticia no sabía cómo actuar y como esto cambiaba todo, no sabía
qué era lo que haría de aquí en más. Mi vida estaba cambiando con mucha rapidez
y tenía que pensar fríamente cuales eran los pasos a seguir.
Llegue más temprano que nunca a
mi trabajo y deje un ramo como siempre en su oficina cuando aún no llegaba.
Apenas vi que ya estaba ahí me acerque sigilosamente y la abrace, le desea
buenos días y deje mis manos unos segundos descansar en su vientre, mientras
besaba su cuello. Me pregunto si planeaba convertir en florería su oficina,
solo le respondí inocentemente que era una ofrenda de paz. Cuando la deje libre
camino hacia su escritorio y se quedo unos momentos ahí hasta que se volteo con
una cajita entre sus manos y me miro preguntándome que significaba aquel
anillo.
