El Baile...Edward POV




Edward POV



Otro año…otra secundaria, con esta ya eran cuatro en las cuales había estado en los últimos años. Lo que en un principio me parecían las mejores aventuras ahora simplemente me molestaba, mis padres no podían estar más de seis meses en el mismo lugar así que cuando comenzaban a aburrirse decidían ir a otra ciudad y todo lo aquello implicaba.



Así pase la mayor parte mi infancia y mi adolescencia, hasta que finalmente los dioses escucharon mis ruegos y la ofrecieron a mi padre la plaza como director del hospital de Forks lo que haría que al menos nos quedáramos un año en este lugar o al menos eso esperaba.


Tanto Carlisle como Esme amaban socializar y conocer gente, así que tratando de que yo conociera a los que tal vez serían mis compañeros de escuela decidieron enviarme a un campamento para pasar mis últimas dos semanas de vacaciones. Fui ahí que conocí a Jacob Black quien me odie en el minuto exacto en que puse un pie en La Push y todo fue creciendo a medida que le ganaba en todas las disciplinas donde habíamos decididos competir, simplemente nunca desee humillarlo, pero si podía ganar lo hacía.





Como era de esperar el perro de Black estaba ahí cuando llegue a la escuela, pero lo que capturo toda mi atención no fue su presencia, sino de la muchacha que estaba a su lado, era por mucho la mujer más hermosa que había visto alguna vez. Sus ojos y cabellos eran de un color chocolate tan intenso e increíble que la hacían única.



Al parecer Jacob noto mi presencia y mi mirada, comenzando así la tediosa rutina de ser molestado por él, cosa que honestamente no podría importarme menos, ya que simplemente me aburría con su presencia y si alguna vez me quede unos momentos más fue solamente para ver a ella….a Bella.



Otra de mis rutinas fue ayudar a mis compañeras con sus mochilas y libros, lo hacía cada mañana con la vaga esperanzo que alguna vez fuera a Bella quien ayudara, pero ella solo me ignoraba, incluso en la única clase que estábamos juntos, apenas y me dirigió unas palabras un par de veces.



No sé muy bien porque pero aquella mañana me levante con optimismo, no es que fuera depresivo o algo así, mas despertar tan temprano no me hacía en lo absoluto la persona más feliz del mundo. Como era de esperar apenas llegue comenzó mi actividad diaria, solo que esta vez escuche con más atención que al parecer Jacob había cortado con Bella y que ella simplemente estaba tan deprimida que no vendría en toda la semana.



Después de dejar a las chicas en sus salones corrí al mío, sin dejar de pensar en ningún momento en lo que acababa de oír, seria cierto o era otro típico chismorreo de pasillo.



A la hora del receso camine hasta mi casillero y me quede mirando a la nada. Solo pensando en cómo saber si lo que había oído era verdad o no, en eso estaba cuando oi una voz que por un momento pensé era producto de mi imaginación.

- ¿Cuanto quieres para ir conmigo al baile? – No pude evitar quedármela mirando como un idiota

-Perdón – Bravo Edward excelente manera de comenzar.

- ¿Cuanto quieres?– Su voz esta vez sonó un poco molesta

- No tienes novio o algo así – Necesitaba saber si lo tenía o no, aun cuando supuse que ya no dado su extraña invitación

- Algo así – Se tomo unos segundos y luego siguió  – Terminamos, más bien termino conmigo por mensaje de texto.

- Genial – Lo dije sin pensarlo mucho, pero saber que ya no estaban juntos simplemente me alegraba, pero luego de ver su rostro quise tratar de arreglar la situación – Digo…bueno… yo – Claramente sin un poco de éxito.

- Lo que sea, aun no respondes mi pregunta – No pude evitar mirar su cuerpo, era tan hermosa, pero como era un adolescente lo suficientemente idiota le hice una pregunta que ni siquiera pensaba.

- ¿Eres virgen? – En verdad  acababa de preguntar aquello.

- Y eso a ti que te importa – Sabia que me iba a dar una cachetada y no es que no la mereciera, pero simplemente aproveche la situación para tocarla.

- Me importa. No quiero dinero.

- Entonces que ¿Un auto? ¿Un laptop?....Lo siento pero no creo que lo valgas – Contuve mi risa al oír todas las cosas que me estaba ofreciendo – Me sueltas – Recién ahí caí en la cuenta que aún sostenía su mano

- Nop – Hice que mi toque fuera más firme aún.

- Esto no tiene sentido – Tal vez para ella, porque para mí era un milagro.

- Tú lo comenzaste.

- Me voy, así que si no te importa me devuelves mi muñeca.

- Creo que aún quiero seguir hablando contigo – Ni siquiera me importaba lo que dijera, pero con solo tenerla cerca ya era feliz, además aquella era por lejos nuestra charla más larga.

- No es mutuo – Note como trataba de zafarse, así que sin pensarlo mucho la arrincone en la pared cercana y la bese, Y Dios ese beso sabia  a gloria, mejor que en mis sueños.

- Ahora Bella quiero que me escuches con atención…no quiero tu dinero, quiero follarte, solo eso – No sé de donde vino aquello, pero no podía desdecirme ahora solo esperar que me golpeara.

- ¿Solo eso? – No esperaba esa respuesta, pero mi corazón ya latía con más fuerza de solo pensar que podría tenerla.

- Bueno no será “solo eso”, será mucho más – Cuando note sus mejillas sonrosadas, no pude evitar acariciarlas suavemente.

- ¿Cómo? y ¿Cuándo? – Eso significaba que aceptaba, estuve tentaba a hacer un baile de la victoria o algo así, pero una parte de mi necesitaba relajarse un poco así que decidí bromear con ella.

- En verdad esperas que te explique el cómo.

- Sabes a lo que me refiero.

- Mi dulce y pequeña Isabella – Me acerque aun mas a ella y aunque trato de contenerse sentí como su cuerpo también se acercaba a mí.

- Aceptas o no – Su voz fue apenas un murmullo.

- Acepto – Volví a besarla, pues era lo mejor de mi día y tenía que aprovecharlo.

- Ahora dime cuando planeas que nos acostemos – Se veía tan hermosa tratando de parecer una mujer fría que estaba cerrando un negocio.

- Bella te aseguro que lo menos haremos será estar acostados, pero ya lo sabrás – Finalmente solté su muñeca y de inmediato extrañe su contacto.

- ¿Cómo? Quiero saberlo ahora Cullen – Necesitaba con urgencia salir de ahí pues su aroma me estaba intoxicando y tal vez cobrara mi parte antes del baile, pero ella tomo mi brazo impidiéndome avanzar.

- A su debido tiempo – Bese su manos.

- Necesito estar preparada – Parecía una niña caprichosa y quise besar sus labios, pero me contuve.

- El elemento sorpresa es un excelente afrodisiaco – Le di un último beso en la mejilla y me marche.



Los siguientes días fueron simplemente un sueño, esperaba cada mañana a Bella en la entrada de la escuela y caminábamos tomados de la mano, no solo era la mejor sensación de mundo, claro que estaba después de lo que sentía cada vez que la besaba, simplemente lo hacía cada vez que podía y al parecer a ella no le molestaba.



Note varias veces como Black nos miraba con odio, sabía que le hervía la sangre de verme junto a ella, pero él era el muy imbécil que la había dejado y yo no podía ser más feliz por su estupidez.



Como todos los días desde el glorioso día de su propuesta íbamos caminando hasta nuestro pequeño mundo privado en la cafetería. Bella necesitaba saber el por qué de mi actitud, pensé en decirle porque te amo, pero aún no era el momento así que hice gala de todo mi cinismo y le conteste.

- Acaso no es obvio –Le respondí mientras nos sentábamos.

- Si lo fuera no te lo preguntaría – Como siempre tenía que sacar las garras.

- Bella mi dulce y linda Bella – No podía evitar hacerla enojar un poco – Es sumamente sencillo, no crees que sería demasiado extraño que apareciéramos en el baile junto si ni siquiera cruzamos media palabra, creo que podríamos generar sospechas – Le respondí como si aquello fuera lo más obvio del mundo.

- Eso basándonos en que las personas que nos rodean fueran seres con inteligencia.

- Como adoro esa lengua afilada que tienes – Tome su barbilla y me acerque a ella hasta casi rozarla – Las cosas que me imagino que podría hacer en mi cuerpo….cosas nada santas – Mierda no necesitaba ponerme a pensar en eso justamente en una cafetería rodeada de gente, idiota o no tenían ojos.

- Edward…- Al oírla murmurar mi nombre la bese.

- Debemos hacer que todo sea más creíble.

- Bueno si quieres hacerlo, no te detengo. Aunque pensándolo bien, creo que sé porque lo haces – La mire expectante.

- Ilumíname.

- Me estas usando de escudo, ahora que todas tus atenciones – casi me corro en mis pantalones al sentir su suave caricia en mi mano – Ninguna te molesta.

- Velo así, ambos hemos salido beneficiados – Como todo adicto simplemente la bese sin pensar en nada más.



Finalmente el día del Baile había llegado, use mis mejore galas y mi madre estaba más que emocionada el verme vestido así. Le sonreí y tome las llaves de mi volvo, casi nunca lo usaba pero hoy era un día especial para mi.



Aparque fuera de la casa de Bella, para luego tocar la puerta me recibió quien supuse era su madre quien me sonrió y la llamo. Literalmente quede sin aire al verla.



- Estas…no existen palabras para describirte – Bese su mano.

- Tú estás muy guapo Cullen, quien diría que tras tu ropa de mendigo – Vale reconozco que jamás me ha importado mi ropa, pero tan mal se veía – Se escondía semejante cuerpo –Al oir eso no pude evitar sonreír muy pagado de mi mismo.

- Imagínatelo sin ropa – Antes que hablara bese su frente y luego llegaron sus padres para hacernos un par de miles de fotos.

Le lleve a hasta mi auto el cual miro sorprendida, la ayude a subir y luego lo hice yo.

- Espero que no hayas tenido que rentar un auto.

-No, es mío – Me miro extrañada.

-¿Tuyo?

- Bella, puede ser que parezca un mendigo, pero no lo soy – No dijimos nada más hasta que llegamos al gimnasio.



Apenas llegamos al lugar se podía sentir la música que venía del gimnasio y llenaba todos los espacios. Nos acercamos a la entrada y fuimos fotografiados, creo que fue inevitable pero ambos sonreímos de manera natural por estar uno junto a otro. 



Solté su mano y la abrace en el momento exacto en que empezaba a sonar “Friday”, al parecer a ninguno le gustaba pues ambos pusimos nuestra peor caras.

- Solo porque es uno de los videos mas visto no significa que a la gente les guste – Todavía no podía entender aquello.

- A la gente tal vez no, pero a ello si – Tome eso como una excusa para bromear con ella.

- Quieres bailar entonces – La comencé a llevar a la pista.

- Esa canción…jamás – Necesitaba besarla así que lo hice, deje un suave beso en su frente.

Después de tomar algo escuchamos una canción que al parecer le gustaba, asi que saltamos a la pista y ahí nos quedamos hasta el anuncio más idiota del mundo. Los reyes del baile y como era obvio que mejor rey que Black.

Despegamos la pista para el tan trillado primer baile y luego por el rabillo del ojo vi como el nuevo monarca se acercaba a nosotros.



- Quieres bailar – Note como la mirada de Bella iba de Black a mi – Te lo pide el rey.

-  No creo en la monarquía Jacob – Sentí como se acercaba a mí – Además ya tengo con quien bailar.

- Bella vamos es solo un baile – Apenas lo dije me arrepentí de inmediato en especial cuando vi por un fugaz momento el rostro de decepción de Bella.

- Esta bien – Casi la tomo de la cintura para impedir que avanzara.



Aun cuando bailo con el perro, su mirada no dejo ningún momento la mía. Fue hasta el DJ cuando note que la música era demasiado romántica y le di diez dólares para que pusiera el ritmo más rápido que existiera, además le pague otros dólares más para que apenas me viera junto a Bella pusiera “Can't Take My Eyes Off You” y asi lo hizo. La tome entre mis brazos y comenzamos nuestro último baile.

- No son solo mis ojos los que no pueden apartarse de ti – La hice girar como en aquellas cursis películas románticas – Mi boca y mis manos tampoco pueden.

- Soy irresistible – Aquello era verdad.

- No sabes cuánto – Quería que este momento fuera eterno, pero hay cosas que simplemente deben acabar.

Salimos tomados de la mano y la lleve hasta el auto, como siempre un muy cómodo silencio se instalo entre nosotros, pero en algún momento note que Bella se tensaba por algo así que le pregunte:

- ¿En qué piensas? – Al parecer la sorprendí o algo.

- ¿Dónde vamos? – Me pregunto curiosa.

- A tu casa.

-  Pero no podemos.

- ¿Por qué?...no se supone que eso se hace después de un baile – No sabía cómo sentirme ante eso, pero creo que Bella deseaba estar conmigo tanto como yo y aquello me dio esperanzas.

- Pero nuestro trato…tú…ya sabes.

- Lo sé, no dejo ni un instante de saberlo, pero no será hoy Bella – Llevaba días pensando en que no quería que nuestra primera vez juntos fuera parte de un trato,  quería que fuera porque ambos lo deseábamos, en mi mente ya un plan comenzaba  a trazarse.

- No – Una nota de decepción tiño sus palabras

- No – La ayude salir del auto y la quede mirando – No deseo que esto termine todavía Bella.

- ¿Termine? – Tome su mano y la bese. Luego capture sus labios entre los míos y acaricie su mejilla, antes de decirle lo que sentía.

- Aun es muy pronto.



Estuve todo el fin de semana pensando y trazando mi plan, sabía que era arriesgado, pero necesitaba comprobar que todo lo que había sentido que pasaba entre Bella y yo este último tiempo era real.

Yo la amaba de eso  no tenia duda, pero necesitaba saber si ella me correspondía, así que por eso decidí alejarme de Bella estas últimas semanas y una vez fuera del instituto me dedicaría a conquistarla. Pensaba ir por ella apenas terminara nuestra última clase e invitarla a salir, incluso si se negaba seguiría insistiendo, luego la llevaría a lugares especiales y haría que este fuera el mejor verano de nuestras vidas.

Aprovecharía mí tiempo libre educándome en el plano sexual, mi experiencia era casi nula en esas aéreas y quería que mi encuentro con Bella fue único y mágico, como todo adolescente vi varias películas porno, según yo aquello era algo así como material didáctico, también leí un par de libros. Necesitaba que ella se quedara a mi lado y nunca más se fuera.

No podía evitar alegrarme cada vez que Bella apenas y tomaba en cuenta los avances de Jacob, pero como todo animal sin amaestrar no entendía las indirectas. Varias veces note las miradas de Bella y quise ir hasta ella y abrazarla, pero aún no era el momento, un último esfuerzo y estaríamos juntos.

Desperté lleno de optimismo el último día del año escolar, hoy por fin me acercaría nuevamente a Bella, sabía que existían claras posibilidades que ella me mandara a volar por mi actitud, pero confiaba en que nuestros sentimientos fueran tan fuertes como yo lo esperaba.

Al fin del día estaba ayudando por última vez a Ángela y vi como Jacob se acercaba a Bella, note como su asquerosa pata tocaba su brazo y me sentí celos, quise arrancarle la mano por tocarla. Nuestras miradas se cruzaron y casi asesino a alguien cuando vi que estaba coqueteando con él, le sonreía e incluso se acercó más a su cuerpo. Simplemente no pude ver más y salí de ahí, para meterme en un salón vacio.

Cuando me sentí un poco más tranquilo vi a Bella por el pasillo y sin detenerme a pensar, la tome entre mis brazos y la hice entrar.

- Volviste con Black – La acorrale en la pared más cercana.

- Eso a ti no te importa – Trataba de quitarme de encina.

- Me importa y lo sabes – Dios como había extrañado tenerle entre mis brazos.

- No lo sé, no sé nada, solo que llevas semanas ignorándome – Tuve que contener mi sonrisa.

- Aunque quisiera jamás podría ignorarte – Lo dije muy cerca de su hermoso rostro.

- Pues lo has hecho muy bien estos días…así que sigue así. Ahora suéltame – Era aún más hermosa cuando se enfadaba.

- No, llego el momento de que cumplas tu parte – Simplemente ya no podía seguir conteniéndome más.

- ¿Qué? –Aquello la sorprendió – Estas loco.

- Si, por ti – La bese de la manera más apasionada que pude.

La lleve hasta la mesa más cercana y besaba cada trozo  de su cuerpo que iba descubriendo, primero le di toda mi atención a sus pechos y luego mis dedos jugaron con su interior. Busque sus labios con desesperación, mientras sentía como Bella se aferraba a mí.

- No tienes una idea lo que te extrañe – Aquello era la verdad.

- Ni siquiera me mirabas – Bese su oído y creo que la ame un poco más.

- Si lo hubiese hecho te hubiese tomado en cualquier parte – Y eso era lo que menos quería, aunque finalmente termine haciéndolo.

- No es eso lo que estás haciendo ahora – Lleve mis dedos al lugar exacto donde quería estar muy pronto.

- No pude contenerme más – La sentí desplomarse  sobre mí.

- No entiendo – Su voz sonó muy bajita

- Bella cuando te vi rodeada de Black mi sangre ardió, durante días vi como se te acercaba, pero me alegraba ver como lo rechazabas, pero hoy le sonreíste e incluso le coqueteaste y simplemente no pude contenerme más.

- ¿Por qué estabas conteniéndote? – Sentí sus labios en mi pecho.

- Por qué no querías que pensara que solo quería estar contigo para cobrar mi parte en el trato Bella, quería que estuviéramos juntos por que ambos lo queríamos. Para mí fue un milagro que quisieras ir conmigo al baile – Su rostro denotaba sorpresa – Si Isabella, así que por eso rechace el dinero y te pedí a cambio follarte, que horrible palabra para describir esto, para mi es más mucho más.

- ¿Más?

- Te amo Bella y quería que estuviéramos juntos por amor y yo…malditos celos que me nublaron y me hicieron simplemente tomarte y …- No pude seguir pues sus labios chocaron con los míos.

- También te amo, idiota. Así que ahora termina tu trabajo – Casi muero al oír aquellas palabras de sus labios y más aun cuando sentí su mano descorren mi cierre.

- Te amo – De un solo movimiento entre en ella y fue como abrir las puertas del cielo. Al llegar ambos al orgasmo oí como Bella gritaba:

- Te amo Edward.

La bese con impaciencia para luego arreglarnos para salir de ahí, una vez en el auto oi como preguntaba muy curiosa.

- ¿Dónde vamos?

- Donde quieras – Entrelace nuestras manos.

- Puedo hacerte una pregunta.

- Dime – La mire maravillado por el milagro que me amara.

- Dijiste que me ignorabas por que querías que el estar juntos fuera una decisión de ambos  y no parte de un acuerdo – Asentí– Entonces dime ¿Qué pensabas hacer para lograrlo?

- Pensaba conquistarte durante el verano, tenía todo un plan trazado y al final tú y yo estaríamos juntos – Y aun cuando ya estábamos juntos no dejaría mis planes de lado

- Suenas muy seguro Cullen – Le sonreí – Si quieres puedes llevarlo a cabo, no tengo ningún problema en ser cortejada.

- Pues entonces vámonos – Le dije.

- ¿A dónde?

- Al paraíso mi amor. Esto recién comienza.



Y exactamente fue así, cada día de ese glorioso verano lo pasamos juntos. Bella me era tan necesaria como el oxigeno y de alguna manera yo sabía que ella sentía lo mismo. Ambos nos negamos a ir de vacaciones a otras ciudades, simplemente no podíamos estar separados ningún instante, incluso sin que sus padres lo supieran cada noche me colaba a su habitación para hacer el amor y luego dormir entrelazados.



Como el verano estaba llegando a su final y pronto deberíamos volver a la escuela decidí darle una sorpresa a mi novia. Hice reservaciones en un lujoso restorán de Port Angels así como también en el hotel más lujoso de la ciudad, bueno todo eso lo logre gracias a la ayuda de mi madre que amaba a Bella como una hija.



Una vez todo listo le dije que le tenía una sorpresa preparada, como era de supones de inmediato se impaciento y me aclaro que no le gustaban para nada. Yo solo le sonreí y la bese, lo que menos deseaba en aquel momento era comenzar una pelea que no nos llevaría a nada.

- Paso por ti a las 7 – Me miro aún un tanto molesta, pero asintió – Ah y te deje un regalo en tu habitación…nada me haría más feliz que lo usaras esta noche.

- ¿Qué cosa? – Se acerco a mí.

- Descúbrelo tu misma – La bese nuevamente y me marche.



Cuando ya faltaba poco para las siete de la tarde me estacionaba fuera de la casa de Bella, una parte de mi estaba temeroso que de simplemente no quisiera venir conmigo, dado su total desinterés con las sorpresas o estuviera enojada por no decirle que haríamos esta noche. Mis temores desaparecieron y también mi habla cuando Charlie me abrió la puerta en el momento exacto en que mi hermosa novia bajabas las escaleras. Simplemente no existían palabras que pudieran describirla en ese momento, todas parecías vacías y se quedaban cortas.



No fue hasta que oí su voz preocupada que medio reaccione y llegue hasta el rellano de la escalera para tomar su mano y besarla.

- Estas…perfecta – Note como se sonrojaba por mi cumplido, bastante mediocre por cierto.

- Tu también te ves muy bien – Digo mirándome al tiempo que me sonreía.

- Nos vamos – Escuche un carraspeo tan ligero como el aullido de un lobo. Había olvidado por completo a los padres de Bella.

Al girarme a verlo note que ambos tenían expresiones bastante disimiles. René parecía realmente encantada por todo esto y no dejaba de sonreír, en cambio Charlie me miraba a mí y luego a su arma que estaba colgado a un par de metros de nosotros.

- Diviértanse muchachos – Fue lo que dijo René colgada del brazo de su marido, no sé muy bien si por un gesto de cariño o contención.

- Nos vemos mamá…papá – Bella se adelanto unos pasos.

- Señores que tengan un buena noche – Entrelace mi mano con la de Bella y caminamos rumbo a mi volvo.



Una vez dentro estuve a punto de enviar mis planes a la basura y tomar a mi novia en el asiento de mi auto, pero sabía que aun cuando nunca lo reconociera había estado toda la parte arreglándose para esta noche, así que mande a callar mi parte egoísta y emprendimos nuestro camino.



Conversamos de todo un poco durante el camino, amaba el sonido de su voz por lo que podría simplemente oírla por horas y nunca me cansaría. Cuando llegamos note como se tensaba un momento al ver el lugar donde iríamos.

- Edward ¿Qué es esto?

- Creo que se conocen como restorán, pero tal vez estoy equivocado – Le respondí tratando de aligerar el ambiente, pero al parecer logre el efecto contrario pues Bella estaba enojada ahora.

- Sabes a lo que me refiero ¿Qué hacemos nosotros aquí?

- Celebrar – Le sonreí y al parecer logre animarla un poco.

- ¿Qué cosa?

- Que tú me ames a mi – Bese su mano – Eso para mí es digno de celebrarse.

- Pero debe costar un fortuna comer en este lugar, además yo…- No la deje continuar, puse un dedo en sus labios

- Deja de preocuparte y solo disfruta.



Después de bajar y señalar nuestras reservaciones, no sin antes ganarnos una mirada de desconfianza del maître del lugar, nos acomodarnos en la terraza que era simplemente magnifica y con una vista hermosa, pedimos nuestra cena. Bella no dejaba de mirar por todo el lugar con una mezcla de felicidad y preocupación.

- Bella calmante puedo pagarlo – Me miro como si hubiese adivinado sus pensamientos.

- Pues deberías decírselo al encargado, creo que espera que en cualquier momento huyamos de aquí.

- Ignóralo, está es nuestra noche – Me acerque para besarla, si lo reconozco soy adicto a su sabor y no puedo pasar mucho tiempo tocándola, pero vamos soy un perfecto adolescente hormonal con una novia de ensueño.

Finalmente llego nuestra comida y con ella la segunda parte de nuestra sorpresa, un grupo de músicos fue hasta donde estábamos y comenzaron a cantar “Bella Notte”, Bella me miro sin entender muy bien qué pasaba.


 

- Me dijiste una vez que yo era un vagabundo y tú simplemente eres mi dama. Tan hermosa y encantadora como esta noche, mi Bella.

- Oh por Dios Edward, es mi película favorita pero ¿Cómo lo supiste? Nunca se lo he contado a nadie.

- Tengo mis métodos – Se levanto de su lugar y se lanzó a mis brazos en el momento en que la canción llegaba a su final.



Sin esperar a que llegaran con la cuenta deje el dinero más que suficiente para pagarlo todo, mientras el mesero reía por mi desesperación mal disimulada. Agradecí que el hotel que elegí solo estuviera al cruzar la calle y que esta misma tarde haya ido en busca de la llave. Así que simplemente caminamos hacia los elevadores.

- Edward ¿Dónde vamos? – Me susurro en un momento que deje de besar sus labios.

- Piso 14 – No pude decir nada más.



Cuando finalmente llegamos a nuestro piso, la tome entre mis brazos como novia y la lleve hasta la habitación. Cerré con el pie la puerta y creo que no despegue mis labios de su boca más de unos segundos.

- Te amo Bella – Le grite mientras la dejaba en la cama.

- Yo más – Una de sus manos estaban en mi cuello, mientras con la otra trataba de quitarme mi chaqueta.

- Dame un segundo – Me separa lo necesario para quitarme la estorbosa ropa y luego ayudarla a ella con eso.



En una velocidad sobrenatural ambos estábamos ya desnudos en la cama. Nuestras respiraciones ya estaban agitadas y nuestros labios estaban hinchados por tantos besos, aquello solo la hacía aún más deseable para mí.



Llene su cuerpo de besos creo que no hubo espacio en su piel que mi boca no tocara, sentía las manos de Bella acariciar mi nuca y mi espalda, hasta que finalmente llegaron hasta mis nalgas las cuales presiono con fuerza.

- Deja los juegos Cullen y hazme tuya – Sonreí ante su orden, bese sus labios y me ubique en su entrada, primero tentándola, solo entraba un poco y luego salía. Sabía que aquello la estaba enloqueciendo, pero amaba cuando perdía el control en mis brazos.



Seguí con mi ritmo hasta que se transformo en una tortura para mí no estar completamente dentro de ella, así que sin más preliminares entre en ella y como siempre que sucedía me sentía en el paraíso.



Entraba y salía con fuerza de su cuerpo que se levantaba producto de mis embestidas. Capture unos de sus pezones entre mis labios y luego el otro, sabía que estábamos por llegar y solo hizo que mis embestidas ahora fueran incontroladas.



Supe que había llegado cuando grito mi nombre y sus dedos se aferraron a mis hombros, yo la seguí segundos después cayendo rendido por la actividad.



Rodé al lado de la cama llevándomela a ella en el camino. Para mí no había nada mejor que tenerla sobre mi pecho, note como sonreí al besar mi piel.

- ¿Qué sucede?

- Solo pensaba – Jugaba con los vellos de mi pecho.

- ¿Qué cosa?

- Que lo hubieras logrado – Realmente no entendía muy bien a qué se refería.

- ¿Cómo? – La subí un poco más para poder mirarla a los ojos.

- Tu plan de conquistarme durante el verano funciono a la perfección – Dejo un suave beso en mi barbilla.

- Te lo dije…no podías resistirte – Ambos reímos y nuestros cuerpos comenzaron a reaccionar – Te amo.

- Te amo – Se sentó a horcajadas sobre mí – Que te parece otra ronda al paraíso, amor mío.

No fueron necesarias las respuestas ambos ya estábamos en el cielo.





Ojala les guste….y buenos nos seguimos leyendo….Espero sus comentarios!!!! y si llegamos a 50 seguidores en el blog...prometo darles una sorpresa!!!!

Besos

Lulu XD

Acá les dejo el link de la historia desde el punto de vista de Bella.



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